“Lo siento pero se nos acabó el presupuesto…”
Reconozco que no dejo de sorprenderme con este tipo de afirmaciones, y esto es por dos razones:
- La primera es que, como decíamos en el post Formación para empresas: FAQ sobre cursos bonificados para empresas, las empresas disponen de unos fondos para formación que se detraen de las cotizaciones a la Seguridad Social de los trabajadores empleados y que en muchas ocasiones pueden cubrir hasta el 100% del coste de la formación. Se trata de los fondos gestionados por la Fundación Tripartita.
- La segunda es que los precios de la formación deben ser justos, con esto no queremos decir que deban ser ni altos ni bajos, deben ser justos. ¿Qué es un precio alto? Si lo que consigo, una vez realizada una formación en ventas, es un departamento comercial mejor formado, que incremente su cifra de ventas en un 5% por ejemplo, ¿acaso no es más caro perder clientes por una mala atención al cliente de las personas que se dedican a ello en la empresa? ¿Cuánto cuesta que mis empleados no tengan un buen manejo de herramientas como el Excel y pierdan 20 ó 25 minutos al día en hacer una tarea, que se podría hacer en apenas unos segundos?